martes, 15 de junio de 2010

Pases Mágicos

LA NIÑEZ DEL POETA. (2.)


Fue la vez que empuñaste tu fuerza.
Te atosigaba un menor con gotas de cianuro.
El internado compuesto de partituras viscerales.
Palabras calzadas en botas por acomodarse en desorden alfabético.
Canciones traspapeladas en el aire embrujado.
El cuento chino de una cocina que olía siempre a pan.
Libros con separadores de papel arroz.
Citas melancólicas en la agenda que pasa a segundas nupcias.
Deslices de bolígrafos traspasando el humo de tus cigarros.
Audacias para encontrar el tiempo que juega a las escondidas:
Un, dos, tres por la taquicardia de una caligrafía apurada.
Nombres trastabillando tus pies que no alcanzan los pedales.
Un portafolio prematuro desbordándose en el plato de cereal.
Días de mago, de trenes en La Sala de Máquinas,
Cianuro para flechas de amor en el Laboratorio de Ciencias.