martes, 7 de septiembre de 2010

Poemas para los secuaces de Dalí

MUJER QUE SALE DEL BAÑO (38.)

El vaho le oculta la vergüenza de verse a los ojos.
Ella se enreda en una toalla, limpia el espejo con el puño limpio,
Pinta la boca de un rojo vivo enfermo en brasas.
Se enfunda una prenda que hace juego con su antifaz.
Mujer de soledades en carrusel
Que tumba.
Los dedos restregan su cara lavada.
Sus ojos resaltan el antifaz negro,
La mujer da un trago al café dulce,
Muerde pan de muerto.
Se distrae con un grito feroz de la casa
Vecina. De amor no tiene más que un puño de sal.